Se trata de una gran habitación Circular con una cúpula translúcida. Contra uno de los lados, la zona donde los recién llegados pueden dejar su equipaje. Contra el lado opuesto, el Gran Cristal, una herramienta que puede transportar a los guerreros hacia cristales menores distribuidos por todo el continente.
Tras darle su grifo a su amado Allen como obsequio le vió despedirse de esta para partir hacia el fuerte de Askal ante lo cual se dispuso a seguirle ya que en cierta parte deseaba permanecer al lado de su amado, había sido un largo viaje desde su lugar de origen aún así ahora yacía en aquel hall de recepción cubierta bajo un vestido de su misma raza y una capa de un tono platinado la cual parecía cubrir por entero su delgada y esbelta figura, aunque aquel lugar parecía desierto como si algo hubiera acontecido en este, pudo notarlo al divisar lo que parecían ser unas pequeñas flores blancas quemadas en el piso.
Se preguntaba donde estaría Allen en aquel momento, aunque quizá lo mejor sería anunciar de su llegada.
La arlequín pasaba ahora por el hall de recepción. Ahí noto a alguien nuevo. Tomo ventaja de que ya estaba caminando sigilosa para saciar su curiosidad. Trepó a los techos de salón, usando los pilares. La mujer que estaba ahí parecía bastante rara. Extraña para Sigh. Su ropa era igualmente de rara que ella. Se preguntaba si la gente de donde venía semejante ropaje tenía arlequines también.
Rodeó a la mujer, continuando de tratar de no ser vista. Escondida detrás de uno de los pilares, notó al muñeco de nieve. Decidió usar sus habilidades de mímica mágica, y algo de la ventriloquia que era parte de su repertorio, para saludar a la mujer.
"HOLO, SEI BOB!!!" -dijo usando una voz estruendosa y profunda. Robada de un hombre de gran porte, mejillas rosadas y risa particular. La payasita lo había visto en un trineo, viajando por la nieve cuando era pequeña.
William llegó al hall de entrada, con su mano sosteniendo la piedra ambar y con la otra leyendo el cuarto libro de "Silver Mist" ya que ahora tenía algo de tiempo para darle un vistazo -Maldita sea, porque diablos no la sigues William! vas a hacer que te maten de esa manera... Aunque sería un giro argumental interesante- Dijo sin quitar sus ojos del libro.
Al escuchar hablar a Bob con una voz un tanto familiar, el joven arameddino cerró el libro y miró hacia el muñeco de nieve -¿Dalay?- También se dio cuenta que había una mujer muy tranquila cerca del muñeco de nieve que estaba prácticamente reventando de devoradoras escarchantes "Oh no, no tiene marca y está peligrosamente cerca de Bob y las flores!!"
Acercó su mano a la mujer y habló con mucha calma -Señorita, por favor colóquese detrás de mi y aléjese del muñeco de nieve parlante. Es muy peligroso y no sería prudente que permaneciera mas tiempo cerca de el- William sonreía para calmar la situación "Ahora no, el hambre está haciendo efecto. Por lo que mas quieras William no hagas ninguna idiotez"
Celine llegó hasta el Hall dando algunos saltitos ya que estaba feliz. En ese momento vio a Will a la chica y una nueva. No entendía qué estaba pasando, hasta que se dio cuenta, la estaba protegiendo porque había una flor. Pero había algo más que pudo notar y los ojos de Will eran los mismo que de Celine. — Will, toma lo necesitas. — Le entregó la plaqueta delante de todos, no quería que le pasara lo mismo que a ella en la enfermería.
Había llegado al hall de recepción para ser recibida por lo que parecía ser un muñeco de nieve parlante, aquello en cierta parte le dió gracia ya que le recordó a aquellas fiestas que solían hacer los de su raza sin embargo al oír como un joven le pedía que se alejara de aquel muñeco y se colocara tras este, lo observó fijamente, quizá por el simple hecho de que su raza no era muy apegada a las costumbres humanas como el hecho de dar la mano a un ajeno.
Por ende dudó un poco en hacerlo aún así dió un paso hacia atrás dispuesta a hacer lo pedido.
- Alassi'aure Man nályë? Sina Allen sinomë ? ( Buenos días quien eres? esta allen aquí?)
Seguramente aquel joven no entendería su lenguaje así que decidió usar mejor el humano.
- Mi nombre es Khalessi soy una medio elfo se encontraría Allen deseo verle.
Tras esto observó como llegaba una joven y le entregaba a aquel joven una bolsa de sangre aquello le hizo mirarle fijamente como si hubiera visto a un demonio.
La chica observó como desde su escondite como iban llegando otras personas al hall de recepción. Esto se ponía bueno. Luego de escuchar a William, Sigh se rascó la cabeza. Como había confundido esa voz con la de Dalay. Era bastante distinta, así que se esforzó más para diferenciarla.
—"HOLO GILLIM, SEI BOB!!!" -dijo en esa voz cavernosa. Como la de un rollizo anciano con actitud afable. Saludó a William, ya que conocía al muchacho.
A la mujer de ojos rojos, similares a los de chico, juró haberla visto en algún lugar del Fuerte, pero nunca supo quien era. La adolescente observó como esta mujer le pasaba algo a William, pero no podía ubicar que era.
Tras ver como la joven le entregaba aquella plaqueta al joven le resultó un tanto extraño al borde de dar un ligero paso hacia atrás para oír a aquel muñeco de nieve.
- Saludos Bob sabes donde esta Allen o en que lugar puedo hospedarme?
Aquello parecía ser alguna clase de broma o al menos eso aparentaba sino fuera porque había visto varias cosas extrañas en el pasado aún así debía conocer mejor las costumbres humanas, además del hecho de que aquellas flores le hacían recordar a aquellas que solían cultivar los de su raza sino fuera por el simple hecho de tener aquel extraño color azulino.
Allen, Allen le sonaba ese nombre. ¿No es aquel grandulon fornido darglancina? Él se fue hace un mes y medio del fuerte, no hemos sabido nada de él, señorita deje de hablar con un muñeco. — Celine tomó su guadaña, gracias a la sombra este creció y cortó al nuevo por la mitad.
Ahora que recuerda vio un hombre así en la enfermería la semana pasada. "No creo que sea él " Pensó.
Ahora Bob le hablaba a alguien mas "¿Me habla a mí?" Pensó William mientras celine llegaba con una plaqueta en mano y se la ofrecía como si se tratara de una bebida normal "Internal screaming Ahora no mujer! Hay alguien observándonos" Ahora comenzó a reír un poco nervioso.
Al escuchar hablar a Kalessi hablar, sus ojos se agrandaron "Realmente creía que los elfos no existían, y menos aun las razas mixtas" Luego Celine partió el muñeco de nieve en dos lo que hizo que el arameddino se llevara la mano a la cara -Realmente no necesitabas hacer eso... Estoy tratando de parecer amigable y tu no ayudas- Dicho esto dejó la plaqueta en el suelo y se acercó al cuerpo herido de Bob.
Recitó una plegaria y se despidió de él -Espero que tus ancestros te reciban allá adonde descansen los muñecos de nieve- Realizó las señas con sus manos -Les'Drac... - Tomó otra gran bocanada de aire -Yol!- Al exhalar, el fuego envolvió al muñeco hasta el punto en que la mayoría del agua se había secado y los capullos ahora eran cenizas.
Luego se acercó a Celine y le dio la caja, susurrándole al oído -¿Realmente crees que tomaría algo así teniendote tan cerca?- William sintió un cierto aroma en su cuello -¿Huele a perfume? ¿O acaso eres tú?- Dijo sonriendo levemente mostrando apenas uno de sus colmillos a Celine.
Ahora era William que tenían un comportamiento al igual que aquel insecto humano. No dijo nada en cuanto lanzó la plaqueta al suelo, solo quedó mirando. Le pareció curioso, Bob el muñeco parlante le estaba dando una plegaria, pero en cuanto a la flor que había renacido, las mataba sin importar como esta se sintiera. "Por Alucard creo que me estoy pareciendo a Daichi"
William se acercó a Celine y la chica repentinamente dio un golpe contra la pared tan fuerte que esta se creó una pequeña grieta. — Había un mosquito molestando.— Miró fijamente a William con una sonrisa falsa. — Si intentas morderme, me alimentare de tus entrañas. — Celine tomó la plaqueta y dio un gran sorbo a su cena. — Si no quieres alimentarte de esta es cosa tuya, pero no vengas a morderme, ve y mata algún animal o de la devoradora escarchante y de paso le das algunas plegarias. —
Posó la mirada a la nueva. — Lo siento querida estoy un tanto hambrienta y de muy mal genio. Porque buscas Allen y quien eres exactamente. — Miró de arriba hacia abajo, sobre todo sus orejas, había comentado de que es un elfo, nunca hubiera creído que es una, bueno en este castillo hay lycan, damphir y ahora elfos. — Creí que tu raza estaba extinta. —
