Hall de Recepción

[Narrador]

Se trata de una gran habitación Circular con una cúpula translúcida. Contra uno de los lados, la zona donde los recién llegados pueden dejar su equipaje. Contra el lado opuesto, el Gran Cristal, una herramienta que puede transportar a los guerreros hacia cristales menores distribuidos por todo el continente.

[Celine]

Seguía leyendo una y otra vez la carta, memorizando algunas frases, levantó la mirada al notar un vrenneth muy conocido. —Zeither. — La mujer se levantó del piso, se acercó y llevó una de sus manos al rostro del muchacho. — Eres tú. — Ya llevaban un tiempo saliendo y no pudo evitar reposar su rostro en el pecho del mayor. — Te extrañe, no sabes cuanto lo hice. — Comentó mirando hacia arriba, sus ojos irradiaban de felicidad, ahora por fin había llegado a Askal.

[Zeither]

En primera instancia no creyó que se encontraría con ella tan pronto, pero había olvidado que el destino últimamente velaba muy a su favor. Encarnó una ceja mientras dibujaba una sonrisa en sus labios, observando la figura de la fémina acercarse hasta él.— ¿Ah, sí? —Cuestionó en un hilo de voz, apenas audible para ellos dos, como signo de la complicidad que compartían. Señaló el papel que sostenía entre las manos.— ¿Esa es mi carta? —Su sonrisa se amplió un poco más al comprobar que lo era.— Está bien, ya puedes dejar de leerla. —Alzó su diestra hasta el rostro de Celine, tomando un mechón efímero de su sedoso cabello y posicionandolo detrás de su oído. Recorrió su mano por el largo de su mejilla hasta llegar a su mentón, levantándolo un poco.— Ya he llegado. —Evidencio lo obvio antes de acercar su rostro al de ella y posar sus labios sobre los propios, en apenas un roce volátil.

[Celine]

Solo llevaban un par de meses saliendo aunque le conocía de antes mientras ella cazaba. Respondió aquel beso, aunque solo fue pequeños segundos, ella deseaba que durara más. — Debes estar agotado por el viaje. — Comentó. — No estoy segura si la habitación que te toque, podrás estar conmigo, en todo caso si no es así, podremos dormir juntos. —Puedes ir a mi habitación, dejar tus cosas allá y si tienes apetito podemos ir al comedor. Pero en el caso que tengas hambre de otra cosa, podemos ir a la enfermería por una bolsita de sangre. — Celine ya se había alimentado, así que le acompañaría de paso le haría un tour por el castillo.

[Shakaki]

-Hola hay alguien-
Digo mirando a todos lados con mi maleta lista para ir a mi habitación aunque era nuevo por lo que sería mi primera vez aquí espero pasarla bien.

[Tachi]

Tachi oyó una voz distante en el hall y sin más planes esa mañana dirigió sus pasos hacia allí. En el lugar se encontraba un muchacho menudo con una cola de caballo. Tharagonés, quizás. Tachi se acercó amistosamente y realizó una reverencia hacia el muchacho, prestando atención a su equipaje.

- Eres un recién llegado, ¿verdad? ¡Bienvenido a Fort Askal!- saludó amistosamente.

Enderezó su postura y unió sus palmas frente al pecho. Tachi era una mujer de manos inquietas.

- Seguro tienes muchas dudas, pero no te preocupes. Los veteranos estamos encargados de explicar todo a los nuevos, así que puedes confiar en mi- explicó con gracia- Para empezar... Askal tiene ciertas políticas respecto a los artículos que puedes traer al fuerte. ¿Serías tan amable de mostrarme el contenido de tu equipaje? ¿Tienes algo de dinero encima?

[Shakaki]

Oigo todo atento a lo que me dice y asisto para abrir mi maleta y mostrar el poco dinero que llevaba encima. Le digo:
-eso es todo. Sólo llevo ropa,mi espada y a mi costado está mi tortuga del lago. Y de dinero llevo poco no se si es suficiente-
Espero su respuesta.

[Tachi]

Tachi se inclinó para ver el contenido del bolso y asintió. Luego tomó el dinero sin mostrar prisa y lo contó distraídamente.

- Vale. Estás un poco corto, pero puedo pagar lo que falta por ti- ofreció con una sonrisa- En el fuerte tendrás alojamiento y comida gratis, además de la posibilidad de trabajar para tener un extra para gastos. El único problema suele ser el tiempo de espera hasta que te asignan una habitación y demás.

Rodó los ojos y gesticuló con las manos para expresar el fastidio de la burocracia. Era prácticamente una seña universal, por más variantes que tuviera.

- No lo comentes por ahí, pero tengo buenas migas con la administradora. Pagaré la cuota para acelerar el trámite y arreglaré tu habitación de inmediato.También debo conseguir permiso para hospedar a tu tortuga en el lago, pero puedo llenar ese papeleo por ti- explicó con seriedad- Tú carga a tu amiguita y yo atiendo eso. ¿Nos vemos en el primer piso en un ratito? ¡Genial!

Tachi sonrió con alegría y salió corriendo a toda velocidad.

*Se va*

[Shakaki]

- Mm ok gracias-
Digo sonriendo aliviado de que pagará por mi el resto y de tener comida gratis. También por el trabajo así que asisto y dejó que se vaya para firmar el coso y al terminar cargo a mi tortuga y camino.

[Soubi]

El viaje había sido tan largo, que lo unico que queria era llegar a mojarse por horas en unas termas, y entonces al llegar al castillo se le abrieron las puertas, mostró la carta y le dijeron que fuera al hall, en fin solo faltaba un poco más, era una guerrera de los alpes y montañas de una region fría pero de hermosos pinos y arboles resistentes al frío, buscó con sus ojos azules, preguntándose quién era la persona que la estaba esperando??

[Tadashi]

La puerta del exterior volvió a abrirse y Tadashi entró con algunos pergaminos bajo el brazo. Días tan bonitos como este se disfrutaban más lejos de la comodidad del cristal.

-Ara?- sonrió curioso ante la vista de una mujer que no conocía, o una niña? a veces era difícil saber! -Bienvenida a Askal! soy Tadashi, necesitas indicaciones?- habría ofrecido un abrazo de bienvenida pero tenía la cabeza en otros lados en ese momento.. todos los días últimamente.